1. ¿Cuál es tu arquitecto o estudio nacional favorito?
Uno de mis preferidos es Antoni Bonet Castellana, un arquitecto con joyas como la Casa Gomis en la Ricarda. Tiene una mirada totalmente contemporánea y a la vez es sensible al contexto y al aprendizaje del pasado.

2. ¿Cuál es tu arquitecto o estudio internacional favorito?
Renzo Piano es un referente, con un espíritu innovador como en Beaubourg (Museo Pompidou), y con una sostenibilidad transversal y con espacios increíbles como la Fundación Beyeler en Basilea.

3. ¿Qué arquitecto joven consideras más prometedor?
Hace poco descubrí Tomás Sarraceno, un arquitecto argentino que tiene obras capaces de hacernos cambiar la mirada sobre los espacios. Unas maneras radicalmente sostenibles de habitar el mundo, aprendidas de la observación de los procesos naturales como los que generan los arácnidos en su hábitat y migraciones. Ello le permite no sólo generar nuevos tipos de espacio, sino también viajes espaciales sin el uso de ningún tipo de combustible.

4. ¿Qué obra nacional de tipología vivienda es tu favorita?
Para vivir, la Casa Ugalde de Coderch.

5. ¿Qué obra internacional de tipología vivienda es tu favorita?
La casa en Burdeos de OMA, donde estructura, espacio, flexibilidad, recorrido y uso se unen de un modo magnífico.

6. ¿Qué obra nacional de tipología hotel es tu favorita?
Me gustó mucho el Aire de Bardenas, donde Emiliano López y Mónica Rivera ofrecen una experiencia del paisaje y del hábitat con muy pocos elementos.

7. ¿Qué obra internacional de tipología hotel es tu favorita?
Me gusta el Hotel Zig-Zag de BIG en Suiza, por su integración topográfica, la activación de las cubiertas como espacio de circulación y la rampa como elemento generador. Me resulta simpático porque una de las experiencias en Suiza que más recuerdo fue un día que nos dedicamos a subir, subir, subir y subir en coche por carreteras con curvas imposibles hasta que nuestro instinto de supervivencia finalmente se activó y decidimos bajar. Inexplicablemente, un poco más arriba aún vivía gente.

8. ¿Qué intervención pública nacional es tu favorita?
Recuerdo con emoción tanto la primera vez que visité el Cementerio de Igualada de Miralles y Pinós como la última vez que lo visité, en motivo del entierro de Miralles.

9. ¿Qué obra intervención internacional es tu favorita?
Me gusta el pabellón suizo de Zumthor en Hannover el año 2000, como arquitectura radicalmente basada en dinámicas de economía circular: no solo el pabellón no consumía materiales, sino que se convierte en un secadero de la madera, con espacios remarcables. Con menos elementos consiguió más vida, esa es la clave de la sostenibilidad real (no nos sirve el “less is les”, ni el “more is more”).

10. ¿Qué obra de la historia de la arquitectura nacional es tu favorita?
La Iglesia de Santa María del Mar en Barcelona

11. ¿Qué obra de la historia de la arquitectura internacional es tu favorita?
La Filarmónica de Sharoun, donde espacio y funcionalidad se funden en un microcosmos orgánico donde técnica y emoción son las dos caras de la misma moneda.

12. ¿Qué país consideras que hace mejor arquitectura actualmente?
Me continúa interesando Suiza, capaz de albergar arquitectos tan distintos como Herzog y de Meuron, Zumthor o Caminada. Una gran diversidad de sensibilidades contemporáneas, cada uno a su manera.

13. ¿De qué país debemos aprender sobre urbanismo?
Creo que debemos aprender de la sensibilidad urbana danesa, humana y sostenible, aunque en todo el mundo hay experiencias interesantes, aquí también.

14. ¿Qué obra te hubiera gustado diseñar?
Cualquiera que cuente con un promotor (público o privado) con visión de presente y de futuro, es decir: centrado en la aportación de valor a corto, medio y largo plazo.

15. ¿Qué proyecto consideras que se debería derribar?
Todos los que no aporten un valor a sus usuarios ni a su entorno, y cuyo derribo se pueda pagar.

16. ¿Quién hubiera merecido ya un Pritzker?
Tomás Sarraceno.

17. ¿Quién crees que podría ganar el próximo?
Bjarke Ingels.

18. ¿Qué arquitecto histórico te habría gustado ser?
Alvar Aalto creo que no tuvo algunos defectos típicos de arquitectos famosos de su tiempo: fue una persona poco dogmática y a la vez imaginativa y sensible, y por tanto alguien perfecto en quien reencarnarse cuando sea necesario.

19. ¿Qué estilo arquitectónico es el que más te gusta?
No me gustan los estilos arquitectónicos, aprendo de las arquitecturas capaces de impulsar al máximo la experiencia de sus usuarios con el mínimo impacto posible.

20. ¿Qué tipología de obra te gusta más diseñar?
No hay tipologías mayores ni menores. He disfrutado tanto desarrollando un hospital de 100.000m2 como ayudando a mi hijo a hacer una cabaña.

21. ¿Dibujas los conceptos en analógico o en digital?
Primero el lápiz, es más ágil. Luego la digitalización, es más potente.

22. Diseño fetiche ¿qué pieza te gusta más del diseño industrial?
Un gaiwan. Son varias dinastías perfeccionando la ceremonia del té a través de una humilde taza.

23. ¿Cuál es el producto que más te gusta de nuestro catálogo?
Me encanta el sistema de cerramiento automatizado de fachada que convierte paramentos opacos o translúcidos en paños transparentes protegidos de la radiación solar.

24. ¿Qué producto faltaría en nuestro catálogo?
Cualquiera que también sea sencillo y atemporal servirá para ampliar la gama, es igual si es un urinario, un sistema de mamparas o una luminaria.

25. ¿De qué proyecto estás más orgulloso?
Uno de los últimos es el Institut de Recerca de l’Hospital de Sant Pau, que reúne varias líneas de trabajo del estudio: es un edificio montado totalmente en seco, y por tanto altamente reciclable, con muy bajo consumo energético, económicamente asequible, funcionalmente flexible, capaz de limpiar el aire de la ciudad, que almacena y utiliza el agua que cae durante todo el año, cuya cubierta es un jardín, que vibra con la arquitectura del recinto histórico de Sant Pau desde una concepción radicalmente contemporánea, que ayuda a la captación de talento internacional y que cuando alguien que no lo conoce pasa por delante suele levantar la mirada hacia arriba.

26. ¿Cuándo decidiste dedicarte a esta profesión?
En febrero del año que hacía COU, cuando pasé de letras a ciencias a medio curso para poder cursar Arquitectura.

27. ¿Te arrepientes de esta decisión?
No, tuve un momento de apuro por culpa de una pregunta de matrices en el examen final de matemáticas que casi me hace repetir COU, pero al final todo terminó bien.

28. ¿Si pudieras cambiar de profesión, cuál escogerías?
No se me ocurre ninguna. Me gusta porque es un arte más social que autorreferencial, y por lo tanto está abierta al mundo.

29. ¿Cuál es tu sello de identidad dentro de tus obras?
Afortunadamente no tengo ninguna obra. Me limito a aportar el máximo de ideas posible al resto del equipo, y entre todos seleccionamos las que consideramos que son las mejores en cada contexto. Un proyecto es la selección final de un montón de ideas: tenemos que proponer las más adecuadas posible para que el edificio viva en las mejores condiciones abierto a la gente, al entorno y al futuro.

30. Utiliza un adjetivo que te defina como arquitecto.
Lo deberían decir mis compañeros, pero me mojo: abstracto.

31. ¿Qué libro de arquitectura nos recomiendas?
El que me recomendó el también arquitecto Octavio Mestre a inicios de COU: Saber ver la Arquitectura de Bruno Zevi.

32. ¿Qué le dirías a un estudiante que quiere ser arquitecto?
Que se lo lea. Puede ser útil para saber dónde se mete: en él aprenderá que la arquitectura va de espacios para los humanos y de todo lo que los conforma (materiales, tecnología, sociedad…).

Cuando se sabe de qué se trata realmente, uno puede crecer, mejorar e innovar, pero sin el conocimiento básico se puede ir muy perdido durante mucho tiempo, y la burocracia que conlleva esta profesión a veces puede hacer perder de vista lo realmente importante.